Los prismas oculares como solución para mejorar tu calidad de vida visual

 

Si en alguna ocasión has experimentado visión doble, puede que la solución sea los prismas oculares. Estos  pequeños dispositivos ópticos son muy útiles para corregir unos cuantos problemas visuales y mejorar la forma en que nuestros ojos trabajan juntos. En este blog, te explicaré qué son los prismas oculares, cómo funcionan, cuándo podrías necesitar uno y sus beneficios. 

¿Qué son?

Los prismas oculares es un tipo de lente que en lugar de tener forma plana, tienen forma triangular, cuya función no es tanto la de enfocar la luz sino la de desviar la dirección en la que viaja (fig.1), por lo que de esta manera ayuda a corregir problemas con el alineamiento de los ojos. Esto es importante para aquellas personas que experimentan  visión doble debido a que sus ojos no se mueven de manera coordinada.

Figura 1: Desviación de la  imagen a través de un prisma ocular

¿Cómo funcionan?

Lo que hay que tener en cuenta es que los prismas no harán que mejore tu agudeza visual, pero sí pueden hacer que veas de una forma más cómoda. Si tienes un problema ocular, como el estrabismo (cuando los ojos no están alineados correctamente), los prismas ayudan a que tu cerebro vea una sola imagen en lugar de dos imágenes separadas, que es lo que sucede cuando hay visión doble.

Para entenderlo mejor te lo explicaré con un ejemplo, imagina que miras fijamente tu reloj y en este caso tu ojo derecho ve el reloj un poco más a la izquierda que tu ojo izquierdo, estas viendo doble (fig.2). La función del prisma ayuda a que la luz de ese objeto se desvíe de una manera que tus ojos lo vean desde un ángulo más alineado, reduciendo o eliminando completamente la visión doble y formándose así en tu cerebro una imagen única. 

Figura 2: Imagen con visión doble 

¿Cuándo podrías necesitar prismas?

Las más comunes son: 

  1. Estrabismo: sucede cuando uno de tus ojos se desvía hacia adentro o hacia afuera, los prismas ayudan a alinear la imagen, evitando la visión doble.
  2. Visión doble (Diplopía): sucede cuando tus ojos no se coordinan bien, los prismas pueden ayudar a fusionar las imágenes en una sola, eliminando la sensación de ver dos cosas a la vez.
  3. Fatiga ocular: si notas que te cansas mucho cuando miras a lo lejos o en cerca, los prismas pueden aliviar esa carga, ayudando a que tus ojos trabajen juntos de forma más eficiente.

¿Qué beneficios ofrecen?

  1. Mejoran la visión binocular: cuando los ojos trabajan juntos, el cerebro recibe una imagen coherente dando lugar a una mejoría en la percepción de la profundidad y hace que las tareas del día a día sean mucho más fáciles.
  2. Alivian la fatiga ocular: si sufres de incomodidad o cansancio al leer o mirar una pantalla, los prismas pueden ayudar a reducir ese esfuerzo.
  3. Son una solución no quirúrgica: la corrección de cualquier ametropía puede ir acoplada con el prisma, de tal forma que en la mayoría de los casos pasa casi desapercibido. 

¿Deberías considerar usar prismas?

Si alguna vez has tenido problemas como los mencionados anteriormente los prismas oculares podrían ser una excelente solución para mejorar considerablemente tu calidad de vida visual. Si crees que puedes necesitar uno, puedes visitarnos en una de nuestras ópticas para guiarte y ayudarte a encontrar la solución adecuada para tu caso.